Título: Cuando marzo tuerce el rabo III |
Los últimos fríos del mes de marzo eran muy peligrosos para el ganado. El viejo cuento del pacto entre el mes de marzo y el pastor –pacto que es roto por el pastor por lo que marzo se venga con sus corderos– incluye un sustancioso diálogo entre ambos:
–Marzo marzueco
tú te vas y yo me quedo
con mis buenas corderadas–.
Y le dice marzo:
–Con un día que me falta
y otro que me preste mi amigo abril
has de tener recuerdo de mí–.