Título: Danzas en la procesión de Nieva de Cameros |
Después de los brindis y el baile de La Redondela, la comitiva procesional arranca para recorrer las calles del pueblo. A ritmo de agudo los danzadores se dividen en dos grupos, uno acompañará a Santiago, el patrón del pueblo, y otro a la Virgen. En sus evoluciones nunca darán la espalda a las imágenes sagradas, siempre frente a ellas, algo habitual en muchas danzas riojanas y españolas, y que tiene su antecedente más lejano en la danza que el bíblico rey David bailó ante el Arca de la Alianza. Al acabar la procesión, los ocho danzadores se vuelven a juntar en un solo grupo y entran todos a la iglesia, donde harán la última reverencia.