Título: El gallo que canta el adulterio de su ama es matado |
Los gallos que cantan que el cura y el ama se acuestan juntos son sacrificados; por el contrario, el que canta «ni oigo ni veo» salva sus plumas. Ya se sabe que en este mundo hay que oír, ver y callar.
Magnífico testimonio de transmisión oral. La madre de las informantes le decía a la abuela que no contase esas cosas a las chiquillas y Victoriana respondía: -¡Mira tu madre, que se asusta de las sombras y se agarra a los bultos! Victoriana contaba el cuento con toda naturalidad y las niñas no entendían nada pero se reían.
Publicado en:
- Javier Asensio García, Cuentos riojanos de tradición oral, Piedra de Rayo, Logroño, 2004.