Título: Los borrachos de carnaval |
Ya ha venido carnaval, carnaval
y tenemos que empinar, empinar,
aguardiente, vino y ron, vino y ron
y después de borrachos, a la prevención.¡Ay, qué tristeza, ay, qué desazón!,
que está vacío nuestro garrafón,
la gente alegre algo ha de dar
para llenarlo y volverlo a vacear.
Las fiestas más sonadas de la llamada comarca riojana de Las Alpujarras eran sin duda las de los carnavales, cuando los mozos de una aldea se juntaban, se revestían, se colgaban cencerros en la cintura y de esta guisa visitaban las aldeas vecinas para pedir algún presente en forma de vianda. Una de las más famosas canciones que cantaban era ésta de los borrachos, que también hemos recogido en Anguiano. La parte de la canción que dice «¡Ay, qué tristeza, ay, qué desazón!, que está vacío nuestro garrafón…» forma parte del pasodoble A La Rioja voy que popularizaron Los Chimberos de Bilbao primero y Los Hermanos Anoz de Milagro (Navarra) después. Los Chimberos se debieron inspirar en esta murga del carnaval riojano para componer el citado pasodoble.